Nada nos podrá separar.

Ellos son los que corren detrás mía cuando quiero escapar de todo, los que me timbran cuando no quiero salir, los que me dicen la verdad aunque me duela, ellos son los que me hacen sonreír hasta en el peor día de mi existencia, ellos me abrazan cuando tengo miedo, ellos son únicos, son los mejores.
Porque no tendré novio, ni una bonita familia unida, quizá haya visto cosas que no me gustaría ver y no ha sido una buena infancia, pero siempre los he tenido ahí y siempre es siempre. Desde los 2 años y medio que tenía, ya eramos amigos, estábamos juntos, nos agarrábamos de nuestros mandilones verdes y corríamos por la rampa, jugábamos en la arena y hacíamos casitas para berberechín. Fuimos creciendo y con nosotros nuestra amistad, cada año eramos más amigos, cuando íbamos al parque las horas pasaban volando, estábamos siempre pidiéndole a nuestros padres que nos dejarán más, porque ese parque nos unió, en el jugamos al fútbol, baloncesto, nos sentábamos sin hacer nada, simplemente charlando de nuestras cosas, de nuestro mundo, de lo que nos importa y de lo que no, de los enemigos, de la gente que se creía más que nadie...en realidad no era solo el parque lo que unía, lo que nos une somos nosotros, da igual donde estemos, parque, portales, bar, yendo al colegio, viniendo, en el cc, el el SL, da igual, porque por muy lejos que esteis de mi, siempre, SIEMPRE...

Seréis mis mejores amigos.